lunes, 20 de julio de 2020
A LA INMENSA MINORÍA
¿Callaremos ahora para llorar después?
R. D.
Mis ojos hablarían si mis labios
enmudecieran. Ciego quedaría,
y mi mano derecha seguiría
hablando, hablando, hablando.
Debo decir "he visto". Y me lo callo
apretando los ojos. Juraría
que no, que no lo he visto. Y mentiría
hablando, hablando, hablando.
Pero debo callar y callar tanto,
hay tanto que decir, que cerraría
los ojos, y estaría todo el día
hablando, hablando, hablando.
Dios me libre de ver lo que está claro.
Ah, qué tristeza. Me cercenaría
las manos. Y mi sangre seguiría
hablando, hablando, hablando.
BLAS DE OTERO, Pido la paz y la palabra (1955)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario